Todos sabemos de lo que se tratan estas frases, imágenes o videos que se popularizan rápidamente a través de las redes sociales. Pero más allá de la intención de promover una situación graciosa, exponer una crítica o hacer referencia a algún problema, el meme se puede convertir en un verdadero problema para sus protagonistas o para la promover ciberbullying.

El término surgió en 1976 en el libro The Selfish Gene de Richard Dawkins, y lo define como unidad de transmisión cultural, o unidad de imitación, y es que un meme es una idea que puede evolucionar, es viral y de rápida propagación.

Los memes, elementos de bullying en las redes sociales

Estas imágenes han afectado a las personas de todas las áreas y a todos los niveles, lo mismo hace con un deportista, cerrajero, médico y hasta con presidentes de naciones, el alcance que proporciona la tecnología es incalculable.

Las redes sociales además de ser espacios de interacción virtual, se han convertido en la actualidad en herramientas de promoción de acoso entre los jóvenes. El acoso se da en forma de burlas u otras maneras de bullying.

Los medios que han tenido mayor alcance de este tipo de acciones fueron Facebook, Twitter y Google+, donde el grupo más afectado comprende la edad de entre 12 a 20 años.

Estas imágenes son en principio para describir una idea o símbolo transmitido de forma masiva abordando temas variados que van desde el humor hasta moralejas de vida. El problema surge cuando son utilizadas como herramientas de acoso virtual.

De esta manera se manifiesta la intolerancia social y la discriminación por orientación sexual, apariencia física y por raza donde no distingue género ni nivel social.

Hacer uso de los memes como ciber acoso o ciberbullying afecta la autoestima de las personas, además de ocasionar otros daños, tales como.

  • Robar o compartir sin autorización videos y fotografías.
  • Agredir a través de comentarios o posts.
  • Envío de mails insultantes o mensajes de texto.
  • Difamación o ridiculización de las víctimas en las redes o a través de la web.

Consecuencias de este tipo de acoso

La utilización de los medios modernos como extensión del abuso o acoso u otra forma de violencia puede ocasionar problemas serios como depresión, baja autoestima, inseguridad, sensación de rechazo hacia las personas, reclusión o pensamientos suicidas, todas estas con posibles consecuencias irreparables o inclusive hasta mortales si no se atienden a tiempo.

Las víctimas de este tipo de abuso pueden también presentar consecuencias graves para ajustarse psicosocialmente, provocar cambios en el comportamiento reflejándose en ambiente escolar o laboral.

Es importante tener presente al momento de compartir o crear memes, cuál es el objetivo al hacerlo y el alcance que puede tener, prever las futuras consecuencias y sobre todo recordar la sensibilidad, empatía y el respeto por las demás personas.

Con los hijos es importante mantener una comunicación constante, además de la supervisión del uso de las redes, conocer las personas con quienes interactúan.

Aunque en muchos casos la sobreprotección de los padres limita al menor poder contar con las herramientas para ser independientes y solucionar problemas, estar atentos a este u otro tipo de hechos que aunque sea de manera diferente no deja de constituir una forma de violencia que pueden afectar el desarrollo social de la persona.